El ex presidente pide un “pacto” para recuperar influencia en el escenario global, por S. Colado

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Felipe González cree “decepcionante” la respuesta de Europa a la crisis y reclama más “coordinación” e “iniciativa”

El actual presidente del “Comité de Sabios” de la UE, Felipe González, ha abogado por “más Europa” y por el reforzamiento de las políticas coordinadas en diferentes frentes y también a la hora de abordar la crisis, ya que hasta ahora no ha existido una “política común” en la Unión ni en la adopción de“medidas anticíclicas” ni en las propuestas sobre reformas “regulatorias” del sistema financiero. El ex presidente socialista realizó estas reflexiones en el marco de la presentación de Europa en suma, una puesta en marcha por profesionales del periodismo que pretende acercar las instituciones de la UE a los ciudadanos.

El ex presidente reflexionó ampliamente sobre los retos del continente, alertando de que “Europa está distraída desde hace 20 años”, ya que aunque ha constituido “un modelo exitoso” en cuanto a desarrollo industrial y derechos, a partir de 1989 el mundo y la sociedad han cambiado con rapidez. Con la caída del Muro de Berlín, el fin de los bloques ideológicos y la revolución tecnológica, los movimientos financieros a escala global crecieron enormemente.

“Implosión financiera”
González analizó algunos factores de la crisis, apuntando a elementos como la abundancia de créditos, que en España se tradujo en los últimos años en crecimientos de hasta el 36% en este concepto cuando la economía crecía en torno al 3,5%, y ante el insuficiente ahorro nacional fue financiación extranjera la que sufragaba ese ritmo, financiación foránea que ahora se ha cortado con la recesión. Subrayó que “la crisis se desata tras la implosión financiera”.

“Si no existiera habría que inventar Europa”
Tras apuntar a la necesidad de fórmulas de acción supranacional, ha señalado que en Europa “ya lo teníamos” con la UE pero “la paradoja” es una “pulsión” hacia “una mayor nacionalización y renacionalización” y acciones intergubernamentales. “Si no existiera Europa habría que inventarla (...) la tenemos pero también hay que sabe usarla adecuadamente”, apuntó. El ex presidente advirtió de que opinaba a título personal y no comprometía así el dictamen de sus compañeros del Comité de Sabios.

Necesidad de aunar esfuerzos
Aunque apunta que las cumbres del G-20 son iniciativa europea y este hecho representa el reconocimiento de que “la crisis es global”, así como “las limitaciones nacionales” para afrontarla, la necesidad de “gobernanza” financiera mundial o el hecho de que hay que contar con los emergentes -“China tiene un tercio de la deuda de EEUU, le interesa que a Obama le vaya muy bien”- cree que no se ha hecho lo bastante en materia de coordinación europea. “No hemos tenido una política común ni en las medidas anticíclicas ni en los aspectos regulatorios”. Así, cree que reformas de las que se han hecho bandera como el fin de los paraísos fiscales , “asociados al dinero negro, al crimen organizado y a la opacidad”, aun siendo positivo no es clave como acción “sistémica”, ya que éstos paraísos existían también hace 20 años y no han sido “determinantes” en el inicio de la crisis.

“Decepcionante” esfuerzo europeo
En cuanto al papel de Europa en la cumbre de Londres, cree que ha sido “decepcionante”, apuntando que “el esfuerzo” de EEUU a la hora de destinar recursos para reactivar la economía es “tres veces el de la UE”. Así, instó a escuchar el llamamiento de Barack Obama en cuanto que EEUU “solo no puede” ya que “Europa sola tampoco puede”, defendiendo la necesidad de “arrimar el hombro”.

Reducir voces para darles potencia
El ex presidente socialista insistió mucho en la carencia de una única voz europea en este tipo de citas, apuntando que se podría ser más “influyente” con un sola visión pero coordinada y representativa de todos que con varios países a título individual. Lo ejemplificó con la forma en la que Kissinger, ex secretario de Estado de EEUU, se refería a la voz del continente cuando se preguntaba “a qué teléfono debo llamar para que se ponga Europa”. González advirtió de que ante la irrupción de los emergentes es inevitable un nuevo reparto del poder en el mundo, pero llamó a recuperar parte de la “influencia” perdida por la UE. Por ejemplo, citando el caso de la reconstrucción de Gaza, explicó que “somos fuertes para pagar las facturas” de lo destruido pero “débiles para influir”.

Pacto social con cinco puntos
Así, el ex presidente socialista instó a afrontar estos retos con un “pacto social, económico y político” entre todos los agentes de la UE con varios bloques de acción bajo el denominador común de más coordinación entre todos los países. Gonzalez también pidió una mayor acción conjunta en las medidas contra la crisis, apuntando que el Consejo de la UE no puede renunciar “a la iniciativa”.

Problema de “rigidez” empresarial
También apeló a recuperar la Agenda 2000, subrayando que, en la comparación con EEUU, Europa no cuenta con peor educación sino que existe un problema de “rigidez” empresarial, ya que al contrario que en América aquí las grandes empresas son las mismas desde hace 30 años. Lamentó la existencia de un “corporativismo” de intereses en el que se mezclan “elites empresariales, políticas y sindicales” donde se penaliza la “innovación”, así como que “el 78% de los alumnos” de las escuelas de negocios no quieren crear empresas. Advirtió de que en cualquier caso se trata de un problema de “trasfondo cultural” apuntando como ejemplo que “es más fácil que ayudemos a nuestros hijos a la entrada de un piso que a la creación de una empresa”. Para González, este debate sobre la competitividad es importante para el mantenimiento del Estado de Bienestar cuando la pirámide poblacional está estrechando la base que sirve de sustento al sistema y que hasta ahora en Europa la inmigración ha paliado.

Energía, migración y seguridad
Otros puntos en los que instó a reforzar las políticas comunes de la UE son las referentes al cambio climático y energéticas en general, donde Europa es “un reino de taifas”, así como el control de las fronteras ante los flujos migratorios. Por último reflexionó sobre la necesaria coordinación en materia de seguridad, en este caso mirando con EEUU y la OTAN.

Europa en suma
El ex presidente realizó estas reflexiones en el marco de la presentación de Europa en suma, una puesta en marcha por periodistas -en su mayor partes procedentes de la reciente reestructuración de TVE- que pretende acercar las instituciones de la UE a los ciudadanos. Al acto acudieron el nuevo número dos del grupo socialista en el Congreso, Eduardo Madina, así como los embajadores de Francia, Rumanía y Chipre.